Recorrido por los pueblos más bonitos del sur de Francia
Viaje de 10 días a Occitania (Midi-Pyrénées) y Nueva Aquitanía (Perigord)
No tenemos muchas oportunidades de viajar fuera de temporada (agosto o puentes), pero este año contábamos con una semanita a finales de octubre y había que aprovecharla. Barajamos varías posibilidades y al final nos decidieron unos vuelos baratísimos a Toulouse y las ganas de hacer turismo tranquilo, visitando pueblos y huyendo de grandes ciudades. Por lo que, nuestro destino una vez más, vuelve a ser Francia.
¡¡Nos vamos a hacer una "escapada rural" a la francesa para conocer algunos de los pueblos más bonitos de este País!!.
"Les Plus Beaux Villages" de Francia (los pueblos más bellos de Francia) es una designación otorgada a los pueblos, con menos de 2.000 habitantes, que han preservado su patrimonio cultural e histórico hasta nuestros días.
¿Quién no querría visitar fascinantes pueblos antiguos colgados de acantilados o escondidos en exuberantes valles? Este viaje en coche por el sur de Francia nos permitirá conocer algunos de estos encantadores rincones.
Viaje por el Sur de Francia |
Visitaremos la región de Occitania, la región con más "pueblos bonitos" de Francia: Cordes sur Ciel (en el departamento del Lot), Najac, Belcastel y Conques (en el departamento de Aveyron), Saint Cirq Lapopie, Carennac, Autoire y Loubressac (en el departamento del Lot)... Sin olvidarnos de otras visitas imprescindibles como Albi o Rocamadour.
Y la región de Nueva Aquitania, más en concreto, el departamento de la Dordoña Perigord, también uno de los departamentos con mayor concentración de "pueblos bonitos" de Francia. La Roque Gageac, Monpazier, Beynac-et-Cazenac, Turenne o Collonges-la-Rouge serán algunas de nuestras visitas, en esta ruta que os recomendamos 100%.
El vuelo
A la hora de planificar nuestros viajes, lo primero, como siempre, el vuelo. En esta ocasión, utilizaremos Toulouse como ciudad de entrada y salida.
- Madrid-Toulouse, el viernes, 25 de octubre, con Iberia Express.
- Toulouse-Madrid, el domingo 3 de noviembre, con Iberia Express.
En total, 9 días completos, para disfrutar de esta preciosa zona francesa.
El alquiler del coche
La mejor opción para poder hacer esta ruta es el coche. Puedes viajar desde España con tu propio coche, o cómo nosotros, volar a Touluse y alquilar allí un vehículo.
El alquiler del coche lo hicimos con Europcar, a través de Autoeurope. Contratamos un coche categoría "compacta" para 9 días, con recogida y devolución en el aeropuerto de Toulouse.
Conducir por Francia es muy fácil. Las carreteras están en muy buen estado, aunque esta es una zona donde lo que abundan son carreteras nacionales. Debes tener en mente que la mayoría solo tienen un carril por cada sentido, por lo que las distancias implican más de lo que parece. En ocasiones bastante sinuosas y con muy mala iluminación nocturna (no os recomendamos recorrerlas entrada la noche). Por otro lado, te recomendamos que no apures mucho la gasolina ya no abundar las gasolineras por la zona.
Viaje por el Sur de Francia |
Nuestra ruta de 10 días por el Sur de Francia: conociendo los pueblos más bonitos de Occitania y Nueva Aquitania
Por supuesto, como siempre, para preparar nuestra ruta lo mejor es contar con la inestimable ayuda de la guía lonely planet, un imprescindible en todos nuestros viajes!!
Día 0 (Viernes): Madrid - Toulouse - Albi
Este día lo dedicamos básicamente a llegar a nuestro destino.
Nuestro vuelo a Toulouse salió puntual, a las 19.45 del aeropuerto de Madrid-Barajas y una hora más tarde, tras un vuelo tranquiló, aterrizó en destino. En esta ocasión no teníamos pensado visitar la ciudad, por lo que después de recoger nuestras maletas (el aeropuerto es pequeño y no esperamos más de 15 minutos) nos dirigimos directamente a por nuestro coche de alquiler.
Del aeropuerto de Toulouse a Albi (primera parada de nuestro viaje) hay tan solo 1h y la carretera está en perfectas condiciones, por lo que el trayecto se nos hizo muy corto. Aunque ya nos empezamos a percatar que conducir por esta zona de noche no va a ser una buena idea, ya que el tema de la iluminación, desde luego, no es su fuerte (y eso en una carretera principal…).
Sobre las 10.30pm. llegamos al que sería nuestro alojamiento por esa noche, el hotel Mercure Albi Bastides. Por cierto, pudimos dejar el coche en el parking del hotel sin ningún tipo de coste adicional, lo que nos vino fenomenal al día siguiente.
Día 1 (Sábado): Albi - Castelnau de Montmiral - Cordes sur Ciel
Nuestro despertador suena a las 8 y una hora después estamos ya listos para comenzar nuestro día de turisteo. Albi nos espera!!
Albi es una pequeña ciudad situada a orillas del río Tarn. Fue declarada Patrimonio Mundial por la Unesco en el 2010 y sin duda merece la pena dedicar al menos una mañana para conocerla. Su gran catedral fortificada, Sainte Cecile, construida en ladrillo rojo; el antiguo palacio episcopal y las viejas casas medievales con vigas de madera, piedra y más ladrillo rojo, hacen de Albi una parada imprescindible en cualquier ruta por el Sur de Francia.
De Albi a nuestro siguiente destino, Castelnau-de-Montmiral, hay apenas 30min de coche.
Castelnau-de-Montmiral es una de las muchas bastidas (ciudades fortificadas medievales) que existen en esta zona. Además, está clasificado como uno de los pueblos más bonitos de Francia. Lo más destacado de su visita es la plaza central, conocida como “la Place des Arcades, rodeada en gran parte por casas medievales con arcadas originales. Pero lo mejor es perderse por sus calles, llenas de casas de piedra con techos de pizarra y persianas con cierres de colores.
El pueblo es pequeñito y se ve rápidamente, apenas nos lleva 40min. Eso sí, es realmente una auténtica maravilla.
Ruta por los pueblos más bonitos del sur de Francia |
Y aún nos queda una última visita hoy!!.Y no cualquier visita, vamos a conocer Cordes-sur-Ciel, uno de los pueblos más bonitos del sur de Francia.
Situada en la cima de una montaña, Cordes parece flotar en el aire cuando la niebla se acumula a sus pies. De ahí su nombre, ya que “sur-ciel” significa literalmente “en el cielo”. Para visitar el pueblo hay que dejar el coche en la ciudad baja (parking de pago) y adentrarse por el empinado camino de adoquines hasta el centro de la ciudad vieja. Esta zona está sorprendentemente bien conservada y es la perdición para cualquier amante de la fotografía… es imposible no detenerse a cada paso.
La verdad es que esta zona está plagada de pequeños pueblecitos encantadores. Pero los días en noviembre son cortos y cunden poco, por lo que dejaremos para una próxima ocasión algunos puntos como: Gaillac, Puycelsi, Bruniquel, el chateau de Penne o Saint-Antonin-Noble-Val (hubiésemos necesitado min un día más para poder recorrer toda esta zona).
Por lo que después de la visita a Cordes-sur-Ciel pusimos directamente rumbo al que sería nuestro alojamiento durante las próximas dos noches: Chambres d’hôtes du Presbytère Le Presbyère, en el pequeño pueblo de La Bastide L-Éveque.
Día 2 (Domingo): La Bastide L-Éveque - Najac - Belcastel - Conques - La Bastide L-Éveque
Después de un espectacular desayuno en nuestro alojamiento, nos ponemos en camino hacia Najac.
Visitar Najac es como adentrarse en un cuento de hadas. Las casas se extienden a lo largo de una única calle que finaliza en su espectacular castillo, ubicado en lo alto de una colina.
Siguiente parada, Belcastel, un pueblecito encantador y discreto al borde del Aveyron, a medio camino entre Rodez y Villefranche de Rouerge.
Con razón, también es uno de los pueblos más bellos de Francia. Del pueblo, aparte del castillo, destaca también su puente medieval del año 1409. La parada no lleva más de un par de horas, pero realmente merece la pena.
Para rematar el día no podía faltar una visita a Conques.
Entrar en Conques es como retroceder en el tiempo. Este pequeño pueblo medieval, escondido en el valle del Lot, es famoso por su Abadía, la Abadía de la Santa Fe de Conques. El pueblo es uno de los centros de peregrinación más importantes dentro del Camino de Santiago francés desde el siglo XI, fecha en la que los monjes de la abadía trasladaron las reliquias de Santa Fe hasta su monasterio. Pero lo mejor es perderse por sus calles y disfrutar de su ambiente único.
Ruta por los pueblos más bonitos del sur de Francia |
No podríamos deciros cuál de estos tres pueblecitos nos gustó más. Son los tres preciosos, y desde luego, fué uno de los mejores días de todo el viaje.
Día 3 (Lunes): La Bastide L-Éveque - Saint Cirq Lapopie - Gruta de Pech Merle - Chemin de halage - Loubressac
Nos despedimos del que ha sido nuestro alojamiento estas dos noches con un magnífico desayuno y nos ponemos en camino. Primera parada... ¡Saint Cirq-Lapopie!
Este pueblo disfruta de una ubicación espectacular! El pueblo y sus pequeñas casas de piedra, se asoman al valle del Lot desde lo alto de su inmenso acantilado. Su carácter inusual ha permitido a Saint Cirq-Lapopie recibir numerosas distinciones, ya que está clasificado cómo uno de los "pueblos más bellos de Francia" y fue elegido "pueblo favorito de los franceses" en 2012 (un año antes que Eguisheim, en Alsacia).
Muy cerca de Saint Cirq-Lapopie se puede visitar una auténtica cueva prehistórica.
La gruta de Pech Merle se encuentra cerca del pueblo de de Cabrerets, en Lot. Esta maravilla de la Prehistoria fue descubierta en 1922 y abierto al público en 1926. Una oportunidad única de ver pinturas rupestres originales con más de 70 representaciones animales y humanas: mamuts, caballos, bisontes, cabezas de ciervos, manos… Para conservar la cueva, el número de visitantes al día está limitado a 700 personas. Así pues, es prudente reservar antes de su visita.
Ruta por los pueblos más bonitos del sur de Francia |
Para terminar el día, el pequeño pueblo de Bouziès es famoso por el Chemin de halage, camino de sirga tallado en la roca en las orillas del Lot. Un agradable paseo para rematar una jornada perfecta.
Solo queda llegar hasta nuestro alojamiento, La Manoir de Rieuzal en Loubressac.
Día 4 (Martes): Loubressac - Carennac - Autorie - Gruta de Padirac - Rocamadour - Loubressac
Hoy madrugamos para poder dar una vuelta por Loubressac, donde nos alojamos estas dos noches, antes de empezar la ruta prevista. Tras la visita decidimos acercarnos a conocer Carennac y Autori, dos pequeños pueblos cercanos a nuestro alojamiento. Aunque no podemos entretenernos demasiado ya que, a media mañana, tenemos reservada la entrada a la Gruta de Padirac.
La Gouffre de Padirac es una gran sima situada en la región de Lot, a unos 8 kilómetros de Rocamadour. Tiene una profundidad de 75 metros y un diámetro de 35 metros. Actualmente, es una de las cuevas más visitadas de toda Francia y cuenta con 2,2 kilómetros abiertos al público. Después de descender a la sima en ascensor o por las escaleras, se recorre una pequeña galería para llegar hasta un río subterráneo. En ese punto, unas barcas nos aguardan. El recorrido es circular y después del espectacular paseo en barca hay que continuar a pie por una serie de salas a cuál más espectacular. Una visita totalmente recomendable.
Ruta por los pueblos más bonitos del sur de Francia |
Después de esta visita, ponemos rumba al plato fuerte del día, Rocamadour.
Tras el Mont Saint Michael, Rocamadour es el lugar de Francia más visitado. Por aquí pasan más de 1.5 millones de personas en el año... lo que hace que agradezcamos viajar aún más en esta época del año.... vemos gente, pero estamos disfrutando de todos los pueblos prácticamente en solitario.
Aferrado al lado de un acantilado en el cañón Alzou en Haut-Quercy, Rocamadour es un tesoro, y no solo religioso. Por supuesto, su santuario atrae a miles de peregrinos cada año, que a veces suben los escalones que conducen a la basílica o sus siete capillas de rodillas, pero también tiene otros activos importantes, como por ejemplo su Grotte des Merveilles, una Cueva decorada paleolítica descubierta en 1920.
Pero sin duda, lo mejor es recorrer sus calles medievales y disfrutar de las vistas desde el vecino pueblo de L'Hospitalet.
Día 5 (Miércoles): Loubressac - Beaulieu sur Dordogne - Collonges la Rouge -Turenne - Sarlat la Canéda
Nos despedimos con pena de nuestro alojamiento y nuestros encantadores anfitriones y nos ponemos en camino. Primera parada, Beaulieu-sur-Dordogne.
Beaulieu sur Dordogne es una pequeña ciudad medieval construida en la margen derecha de la Dordoña. Destaca la abadía de Saint-Pierre con un peculiar tímpano. Pero lo mejor para disfrutar de este pueblo, es perderse por sus callejones empedrados repleto de atractivas casas de piedra y entramado de madera.
Continuamos nuestra ruta por uno de los pueblos más originales y bonitos de Francia: Collonges la Rouge.
Collonges la Rouge es un pueblo especial donde los haya. Este pueblo de origen medieval destaca entre todos los pueblos de la zona por su particular color rojo. No es de extrañar que haya sido catalogado también como uno de los pueblos más bonitos de Francia.
Siguiente parada, Turenne, un pequeño pueblo medieval situado en el departamento de Correze, conocido por ser la capital del importante vizcondado de Turenne que dominó la región de Limousin, Quercy y Perigord durante diez siglos. La villa de Turenne gozó de grandes privilegios hasta bien entrado el S.XVIII y hoy en día aun podemos observar los restos de ese importante pasado a través de un excepcional patrimonio histórico. El interior del pueblo, con sus calles empedradas y sus casas con tejados de piedra gris, conservan un encanto especial que te transporta a otro tiempo.
Que ver en el Perigord francés |
Nuestra última parada del día será el precioso pueblo de Sarlat la Canéda, capital del Perigord negro, y nuestra base de operaciones para las próximas noches.
En este punto, comentar que organizar una ruta por el Périgord es muy complicado, ya que está repleto de pueblos bonitos, castillos y grutas prehistóricas. Nosotros nos centraremos en la zona del Perigord Negro, pero sin duda tenemos pendiente volver para terminar de recorrer todas sus maravillas.
Día 6 (Jueves): Sarlat la Canéda - Beynac et Cazenac - Castelnaud la Chapelle - Chateau des Milandes - La Roque Gageac - Sarlat la Canéda
Después de un estupendo desayuno en nuestro nuevo alojamiento ponemos rumbo a la primera visita del día, Beynac-et-Cazenac.
Beynac-et-Cazenac es un pequeño pueblo ubicado en la ladera de un acantilado. No es de extrañar que sea uno de los pueblos más bellos de Francia. Todo en él parece sacado de un cuento: las ventanas de los edificios color miel se asoman a las empinadas y esbeltas calles adoquinadas; la iglesia de Ste. Marie se balancea en un pico del acantilado de piedra caliza mientras que el castillo de Beynac está encaramado en otro.
Otros de los pueblos más bellos de Francia, Castelnaud-la-Chapelle, está dominado por un impresionante castillo. Hoy en día, el castillo alberga en su interior el Museo de la Guerra Medieval, en el cual encontramos una importante colección de armas y armaduras medievales, así como máquinas de asedio. Pero lo mejor, sin duda, es que desde lo alto de sus muros podemos disfrutar de unas magníficas vistas del Perigord Noir.
Que ver en el Perigord francés |
Otra visita muy recomendable en las proximidades son los jardines de Marqueyssac, pero como el tiempo no acompaña decidimos dejarlo para una mejor ocasión.
Decidimos sustituirlo por visitar otro de los muchos castillos de la zona, en este caso, el Chateau des Milandes, una bella muestra de arquitectura renacentista con elementos góticos que sin duda merece la pena visitar si estamos por la zona.
La última visita del día será La Roque-Gageac, considerado uno de los pueblos más bonitos de Francia.
Su enclave único a los pies de un acantilado y del río Dordogne, harán que te enamores de él nada más pisarlo. Por cierto, una actividad muy habitual es la de hacer un pequeño tour en gabare (antiguas embarcaciones tradicionales de la zona), pero debido a la lluvia no ofrecían servicio, por lo que nos conformamos con disfrutar de un agradable paseo por el pueblo.
Día 7 (Viernes): Sarlat la Canéda - La Maison Forte de Reignac - La Roque Saint Christophe - Chateau de Comarque - Sarlat la Canéda
El valle del Vézère ofrece la visita a un gran número de yacimientos prehistóricos. Siguiendo el curso del río, se puede visitar el acantilado de la Roque Saint-Christophe, el pueblo troglodita de la Madeleine o la Casa-Fortaleza de Reignac en Tursac. Este último, será nuestra primera visita de hoy.
Vamos a visitar el único Castillo Acantilado Troglodita de Francia, me refiero a la Maison Forte de Reignac. Esta mansión troglodita se levantó durante la Edad Media al abrigo de un acantilado con una clara finalidad protectora, y de hecho el acantilado lleva protegiendo a los humanos los últimos 20.000 años, como demuestran las excavaciones arqueológicas que se han llevado a cabo aquí. Se trata de una casa-fortaleza excavada en piedra. Su interior es infinitamente más grande de lo que se pudiera sospechar vista desde el exterior. Su fachada oculta unas impresionantes salas: una gran sala de honor, una sala de armas, una cocina, varias habitaciones, una capilla, un calabozo... Esta “casa-fortaleza”, conservada en un estado excepcional y totalmente amueblada de época, es el único monumento de Francia de este tipo totalmente intacto. Además, se puede visitar uno de los mejores museos de la tortura en su interior.
Que ver en el Perigord francés |
Siguiente parada, La Roque-Saint-Christophe. Este verdadero muro de piedra caliza, de un kilómetro de largo y ochenta metros de alto, está surcado por un centenar de refugios bajo roca y largas terrazas aéreas. Estas cavidades naturales fueron ocupadas por el hombre en la Prehistoria y después se modificaron hasta convertirse en una fortaleza y una ciudad en la Edad Media. La visita de la Roque St Christophe permite hacerse una idea precisa del modo de vida que llevaron durante milenios nuestros ancestros trogloditas.
Continuamos con la visita a las Cabanes du Breuil, curiosas construcciones redondas de piedra seca que datan de mediados del siglo XIX y que están catalogadas dentro del patrimonio histórico francés.
Y no podíamos finalizar el día sin la correspondiente visita a un Chateau... en esta ocasión estamos hablando del Chateau de Comarque.
Pero en esta zona, no solo se encuentra el propio castillo. Durante el año 1915, los por entonces propietarios del Castillo, exploraron las cuevas bajo el acantilado y descubrieron las cuevas prehistóricas y los grabados, 34 en total. La cueva fue declarada patrimonio histórico, pero hoy en día no está permitida su visita. Lo que sí se pueden ver, son algunas de las casas de los trogloditas.
Día 8 (Sábado): Sarlat la Canéda - Cadouin - Chateau de Biron - Monpazier - Belves - Sarlat la Canéda
Comenzamos el día visitando el Cloître de Cadouin.
Se trata de una abadía fundada en el s.XII y ha sido clasificada como Monumento Histórico y Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. La abadía ha conservado su iglesia abacial y su sacristía de estilo románico original. Sin embargo, es famoso por su excepcional claustro gótico flamenco o renacentista, construido en los siglos XV y XVI. La riqueza de su ornamentación justifica sin duda su visita.
Después, nos acercamos a conocer el Chateau de Biron, un castillo que parece sacado de una película. La verdad, no teníamos pensado realizar esta visita, pero nos ofrecieron una entrada combinada para visitar el Cloître de Cadouin y el chateau y sin duda no nos arrepentimos de ver los dos.
Nuestra siguiente visita será Monpazier. Declarado cómo "Plus beaux villages de France", la Bastida de Monpazier es considerada como el ejemplo más típico de las bastidas del suroeste y es sin duda la mejor conservada del Périgord. Siete veces centenaria ha conservado su carácter original a pesar de los daños causados por la guerra de los Cien años y de las guerras de religión.
Que ver en el Perigord francés |
Y finalizamos el día visitando la pequeña localidad de Belves. El tiempo no acompañaba demasiado, por lo que hoy decidimos retirarnos pronto a descansar. Mañana toca vuelta a casa...
Día 9 (Domingo): Sarlat la Canéda - Cahors - Moissac - Touluse - Madrid
Antes de coger el vuelo que nos devolverá a casa, tenemos aún un par de paradas pendientes: Cahors y Moissac.
Hay dos visitas imprescindibles en Cahors: el puente Valentré, el más famoso de los cuatro que cruzan el Lot en la ciudad y las sensacionales vistas que se contemplan desde el Mont Saint-Cyr, y la Catedral de Saint Etienne (San Esteban).
Moissac es conocida por albergar la formidable Abadía dedicada a Saint Pierre, en la que destaca su hermoso claustro.
Que ver en el Perigord francés |
Con esto finalizamos esta maravillosa y tranquila escapada. El ritmo ha sido más bien pausado y tenemos que decir que, quizá por eso, ha sido uno de los viajes que más hemos disfrutado de los últimos años.