Día 1: Comienza la aventura... Primera parada, Cracovia
La colina de Wawel en Cracovia
Pi,pi,pi,pi... pi,pi,pi,pi.... "¿¿pero que ruido es ese??, si me acabo de acostar!!". Poco a poco mi mente se va poniendo en funcionamiento y reacciona, apago el despertador y comienzo a activarme. Son las 4 de la mañana y tengo que coger un vuelo!!! Me despido de E, que se queda plácidamente durmiendo y salgo de la habitación. C_viajera ya está también a pleno rendimiento. Recogemos las maletas, metemos todo en el coche y ponemos rumbo al aeropuerto.
El coche lo vamos a dejar en el parking de larga estancia de Aena, que tiene un 10% de descuento si tienes la tarjeta Iberia. Muy práctico para estancias cortas, sobre todo si tienes que coger un vuelo a primera hora de la mañana o aterrizas muy tarde.
Cuando llegamos a la cola de facturación de Ryanair, eso es la guerra! Madre mía, pero de donde ha salida tanta gente!! Con la típica "buena organización" de esta compañía, después de una hora de cola conseguimos facturar la maleta, y ala, todos 'pa dentro!!.
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| Esperando el vuelo |
Eso si, tenemos un vuelo muy tranquilo y podemos aprovechar para "descansar" un poco los ojos. En 3h30min aprox estamos en Cracovia!
El aeropuerto internacional Juan Pablo II (KRK) se encuentra a unos 12 Km al oeste de Cracovia y cuenta con dos terminales:
- Terminal 1 para vuelos domésticos.
- Terminal 2 para vuelos internacionales.
Nuestro vuelo nos deja en la terminal 2 y para llegar del aeropuerto de Cracovia al hotel en autobús tenemos que:
- Coger el transfer gratuito de la terminal 2 a la 1 (esta indicado nada más salir, y sino, simplemente hay que seguir a todo el mundo). Este primer bus nos deja justo donde se encuentra la marquesina del autobús al centro.
- Coger el 292 que en 30-40 min nos deja en la estación central de trenes de Cracovia (Kraków Glówny). Para Comprar el billete, hay una máquina en la propia parada (en la marquesina). Seleccionas el idioma (hay español) y haces el pago con tarjeta de crédito (no hay necesidad de tener divisa polaca). El precio es de 4PLN (1€). Importante, no olvidar validar el billete una vez dentro del autobús.
Nos bajamos un poco antes de llegar a la última parada de la ruta, justo en frente de nuestro hotel, el ibis budget Krakow Stare Miasto. Hacemos el check-in y dejamos las maletas en la habitación. Son aprox las 13pm y ya estamos listas para conocer la ciudad!!
Primera parada, la Galería Krakowska, a un paso del hotel. Allí en el nivel -1 hay una oficina de cambio donde nos hacemos con los primeros zlotys. Tened cuidado con el cambio de la moneda en Cracovia , aproximadamente tiene que ser de 1 eur=4 PLN y sin comisión.
Una cosa que me resultó bastante curiosa durante el viaje, es que en la gran mayoría de las ciudades que visitamos, la estación de tren está integrada dentro de un mega centro comercial, como es en este caso. Y a veces tienes, estación de tren, de autobuses y centro comercial, tres en uno 
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Nuestro siguiente destino, la colina de Wawel. Para llegar Rodeamos caminando el centro histórico por el Planty, un cinturón verde de jardines y parques en el mismo lugar que antes ocupaba la muralla que protegía la ciudad. Cracovia es una ciudad pequeña, si te gusta pasear puedes recorrerla andando sin mucho esfuerzo.
Ya casi cuando estamos llegando vemos un sitio para comer que tiene bastante buena pinta, el restaurante Pod Wawelem Restauracja, y como el hambre ya aprieta, nos sentamos para tener nuestro primer contacto con la gastronomía del País.
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| exterior e interior del restaurante | |
De aperitivo te ponen en la mesa un mega pepinillo y col encurtida o algo similar ¿?, no se que era pero la tipa de la mesa de al lado se lo comía a cucharadas . Pedimos unos pierogi, una especie de empanadillas pero de masa blandurria que se pueden encontrar rellenas de todo tipo de cosas (carne, salmón, espinacas con queso ... incluso pueden ser dulces). No estaban mal. Y una sopa y un plato de pollo (con un plato único es más suficiente porque todos vienen acompañados con arroz, patatas, verduras...) Y para terminar te invitan a una copita de licor. Un sitio muy recomendable.
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| primer contacto con la gastronomía polaca | |
A unos pasos del restaurante se levanta la colina de Wawel, una visita imprescindible si estas en Cracovia, ya que aquí se encuentra la catedral y el castillo.
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| accediendo al recinto | |
Después de subir la cuesta accedemos a un gran patio y nos topamos con la primera de las muchas maquetas táctiles de bronce hechas para invidentes. Estas reproducciones a pequeña escala representan los monumentos más populares en la ciudad. En los días posteriores nos daríamos cuenta que están en la mayoría de las ciudades turísticas... olé por los polacos!!
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| Las maquetas llevan descripciones escritas en alfabeto Braille (en versión polaca e inglés) |
La catedral tiene un exterior precioso salpicado de cúpulas y torres. La entrada al recinto interior es gratuita, aunque puedes comprar un ticket que te da acceso a las criptas, la campana de Segismundo y el Museo de la Catedral por 12 PLN. De todo esto, en nuestra opinión, lo único destacable es subir al campanario, pero a nosotras es que nos gusta eso de subir escaleras empinadas... Pues eso, tras subir por una escalera de madera e ir pasando campanas de diferentes tamaños (la última del todo es la "güena") se puede ver la famosa Campana de Segismundo (Zygmunt Bell), una impresionante pieza de más de once toneladas construida en el año 1520. Se trata de la campana más grande de Polonia y la segunda más grande del mundo. Únicamente la hacen sonar en ocasiones especiales, y hacen falta al menos 8 personas para poder mover el enorme badajo de 350 kg.
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| fachada de la catedral |
Después de la sesión de fotopostureos en la catedral nos acercamos al castillo, que esta pegado pared con pared con la anterior. Aquí destacar el bonito patio interior de estilo renacentista, con arcos en los balcones de las tres plantas del edificio. Del interior no visitamos nada. El Palacio está dividido en diferentes estancias que se visitan por separado, aquí podéis ver los precios y horarios.
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| patio interior del castillo |
Y por ultimo puedes descender y salir al exterior por una gruta subterránea, guarida del temible Dragón de Wawel: "Según cuenta la leyenda, un maligno dragón vivía en una cueva en la colina de Wawel mientras se dedicaba a devorar a los ciudadanos y nadie sabía cómo acabar con él. Fueron muchos los que lo intentaron, hasta que un pobre zapatero decidió rellenar con azufre la piel de un cordero. El dragón devoró el cordero y le entró una sed inmensa, por lo que se bebió toda el agua del Vístula y explotó. De este modo los ciudadanos se vieron liberados de su gran pesadilla"
Pues bien, la experiencia, aunque barata (al cambio cuesta algo así como un euro), en mi opinión es un poco "disappointment", básicamente pagas por bajar las escaleras y atravesar una mini cueva para llegar a la orilla del río vístula, en cuyo paseo esta la famosa estatua del dragón que cada cierto tiempo lanza una llamarada de fuego por la boca.
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| no es tan fiero el dragón como lo pintan... |
Por hoy damos por finalizadas la visitas "culturales".
Llevábamos reservados para el día siguiente la visita al campo de concentración de Auschwitz y a las mina de sal. Lo hicimos con antelación a través de esta web. Una vez hecha la reserva recibimos un correo con las instrucciones comentándonos que los tickets teníamos que recogerlos el día antes de la excursión, en la oficina de Cracow City Tours en la calle Florianska 44 y antes de las 19.45 de la tarde. Así que nos dirigimos hacia allí.
Una vez en la oficina solo tuvimos que decirle a la chica que teníamos billetes reservados a nombre de "MARGARITA", el número de la reserva y listo. La ventaja de hacerlo así es que se paga en este momento, no hay que pagar nada por adelantado.
Ya con nuestros tickets para los dos tours en la mano, pasamos por el Mc Donalds para comprar la cena para llevar y al hotel. Que ya no nos daba la vida para más y el día siguiente prometía ser intenso.
