Día 9: Free Walking tour Praga y concierto de música clásica
Qué hacer tres días en Praga: Stare Mesto, la Ciudad Vieja de Praga
Nuestra primera parada del día será la Casa Municipal (obecni-dum), cuya fachada fue diseñada por Alphonse Mucha, padre del art-nouveau checo. Se puede visitar por dentro o asistir a alguna de las representaciones, pero nuestro objetivo hoy es la cafetería “Kavárna Obecní dům” que se encuentra en la planta baja del edificio.
Es uno de los cafés más bonitos de Praga y su interior es una auténtica obra de arte. Además ofrece toda clase de desayunos, desde el básico (consistente en café o té, pan y bollos casero, mantequilla, miel, mermelada por 90 Kč, unos 3,80 €) al clásico "English breakfast" por 230 Kč (8,80 €).
Casa Municipal, Praga |
Y podemos afirmar que no hay mejor manera de comenzar la jornada!! Todo muuuuy rico
cafetería “Kavárna Obecní dům”, Praga |
Depués de este fantástico desayuno, atravesamos la torre de la pólvora (una de las antiguas entradas a la Ciudad), para llegar a la Plaza de la ciudad vieja, la Plaza más antigua y más importante de Praga y uno de sus lugares más bonitos que hemos visto nunca. Allí se encuentran, por ejemplo, el famoso Reloj Astronómico de Praga, la Iglesia de Tyn o la iglesia barroca de San Nicolás. Pero de momento tenemos que pasar de largo, no podemos entretenernos demasiado, ya que la primera actividad que tenemos pensada para hoy es realizar un "Free walking Tour" con Sademans.
Plaza de la ciudad vieja |
Esta compañía no es nueva para nosotros ya que hemos realizado otros recorridos turísticos con ellos en otras ciudades europeas como Edimburgo, Cracovia, Varsovia..., y siempre nos hemos llevado una grata experiencia. Así que ¿por qué no repetir?
En el caso de Praga ofrecen tours en Español que salen todos los días a las 10:00h, 10:40h, 12:00h y 14:00h. Comienzan delante de la tienda Cartier y la Oficina de Turismo (Czech Tourism) y los guías son fácilmente identificables por sus paraguas y camisetas rojas.
Nosotros hemos reservado para el tour de las 10:00 de la mañana. Cuando llegamos está hasta arriba de gente, pero no hay problema. Nos apuntan en una lista y pronto nos van dividiendo en grupos de unas 25 personas (no recuerdo exactamente el número, pero tampoco era un grupo excesivamente grande) y por cada grupo, nos asignan un guía. El nuestro se llama Carlos, un nombre difícil de olvidar estando en Praga...
La visita guíada dura aproximadamente 3 horas (con una parada en medio para tomar algo y hacer un breve descanso). El recorrido es a pie y durante el mismo podemos disfrutar de algunos de los principales puntos de interés de la ciudad como el Reloj Astronómico en la Plaza de la Ciudad Vieja, el Teatro de los Estados (lugar donde Mozart hizo el estreno de Don Giovanni), la Plaza de la República, el Barrio de Josefov (antiguo gueto judío de la ciudad)... Pero sobre todo, lo que más nos gusta, es que en realidad es un paseo por la historia. Algo que no se puede ver, sino vivir y que Carlos narra con pasión, haciendo que el tiempo vuele entre anécdotas y relatos de hechos históricos que ocurrieron en las mismas calles por las que vamos pasando.
Y por si aún no lo sabéis, el "Free Walking Tour" es una visita guiada que no tiene un precio fijo, sino que es a base de propinas. Cada uno es libre de decidir cuanto dinero dejar al guía al final del tour. Totalmente recomendable!!
Después de la visita nos acercamos a comer al restaurante Mlejnice, bastante céntrico y con comida típica checa a un precio muy asequible. Nos pedimos unos goulash servido en pan (mmmm... riquísmo) y unas cervezas. Un sitio que no os podéis perder!!.
Restaurante Mlejnice, Praga |
Con la tripa llena nos dirigimos de nuevo a la Plaza de la ciudad Vieja, esta vez para disfrutar de todo lo que ofrece con un poco más de detenimiento.
Decidimos primero entrar en la Iglesia del Tyn que, como sacada de un cuento de hadas (eso sí, algo gótico...), se alza en uno de los extremos. Acceder al interior puede resultar un poco complicado, damos una vuelta alrededor algo despistados... para finalmente descubrir que hay que entrar por el arco que se encuentra entre las terrazas
Iglesia del Tyn, Praga |
Por dentro no tiene nada que ver con como es por fuera. Es igualmente espectacular, pero en un estilo barroco muy recargado. Por desgracia no se pueden hacer fotos. Hay una persona con un cartel enorme colgado al cuello con el típico símbolo de cámara de fotos tachada y que te va persiguiendo por todas partes... no te pierde de vista... una pena.
Iglesia del Tyn, Praga |
Ha llegado la hora de ver en marcha el famoso Reloj Astronómico!!. Cada hora en punto todos los turistas nos congregamos en torno a la torre del Ayuntamiento para disfrutar del espectáculo. Apenas dura 45 segundos, así que... no te despistes!!
Junto a la esfera superior pueden verse cuatro figuras alegóricas que representa: la vanidad (con un espejo) la avaricia (con una bolsa de dinero), la muerte (el esqueleto) y la lujuria (representada por un turco). A en punto, el vanidad, se mira en el espejo; el avaro, con el bolso, tuerce la cabeza porque todavía no quiere irse de este mundo; la muerte toca su campana e invierte su reloj de arena. Y entonces los 12 apóstoles desfilan por las ventanas superiores, canta el gallo y suena la hora... "esto es to, esto es to, esto es todo amigos..."
Reloj Astronómico de Praga |
En realidad lo más espectacular del reloj, obviamente no es lo que acabo de describir, sino el reloj en sí mismo y el maravilloso mecanísmo de su esfera astronómica, capaz de mostrar 4 tipos de horas distintas: la hora babilónica, la hora checa antigua (utilizada en la Edad Media), la hora alemana o civil (introducida en la Edad Moderna y marcada en números romanos. Es la que se usa en la actualidad) y la hora astral.
Reloj Astronómico de Praga |
Cuenta la leyenda que tras ser construido por el maestra relojero Hanus, este fue cegado para que no pudiese construir otro igual. El relojero, ya ciego, se vengo y destruyó el mecanismo. El reloj paró y Hanus cayó muerto al instante. Se dijo que una maldición recaería sobre todo aquel que intentara reparar el reloj, volviéndolo loco o directamente provocándole la muerte. Después de esto y debido a su complicado sistema pasaron años hasta que consiguieron arreglarlo...
Lo que no cabe duda es que es uno de los relojes más antiguos y con más detalles que se hayan fabricado. Y a pesar de haber sufrido numerosas reparaciones (incluyendo los grandes desperfectos que sufrió durante la Segunda Guerra Mundial) sigue en funcionamiento desde el año 1948.
Después del espectáculo nos disponemos a subir a la torre del Ayuntamiento para obtener las mejores vistas de la Plaza de la Ciudad Vieja. La taquilla para comprar el ticket se encuentra en una puerta situada a la derecha del reloj astronómico y la entrada al lado contrario, al izquierdo. La entrada cuesta 120 CZK (4,45 Eur) y realmente merece la pena el gasto.
Para llegar a la cima tienes dos opciones: escaleras o ascensor. La decisión es difícil, eh? Elegimos obviamente ascensor, y en apenas unos minutos estamos disfrutando de la panorámica que tenemos ante nosotros... oooooooh!! Simplemente, nos deja sin palabras.
vistas desde la Torre del Ayuntamiento, Praga |
vistas desde la Torre del Ayuntamiento, Praga |
Después de un buen rato, en el que a veces "tienes que pelear" un poco para hacerte hueco y conseguir esa ansiada foto (yo por una foto maaaaa-to), volvemos a bajar de la torre del ayuntamiento.
Llevamos reservadas por internet entradas para un concierto de música clásica en la iglesia de St. Salvator Klementinum. Lo compramos a través de la web de Prague ticket office, aunque no hubiese hecho falta, ya que una vez en Praga, lo puedes encontrar incluso más barato, en cualquiera de las múltiples iglesias que ofertan este tipo de eventos (los venden en la misma puerta).
El concierto empieza a las 19:00 y aunque aún es pronto, decidimos ir hacia allí y por el camino ir cotilleando alguna tienda en busca de un imán que nos llame la atención. No somos de volver a casa cargados de cosas, pero un imán no puede faltar, y tengo que reconocer que soy un poco especialita a la hora de elegirlos... no me vale cualquiera... Por suerte entramos en una tienda de marionetas y bingo!! un precioso imán hecho a mano (podéis ver parte de mi colección en instagram )
buscando como llegar a la Iglesia de San Salvador |
Después de un agradable y exitoso paseo llegamos a nuestro destino. Justo al lado del Puente Carlos, se abre una pequeña plaza circundada por varios monumentos de gran riqueza histórica y arquitectónica, entre ellos la majestuosa Iglesia de San Salvador, un símbolo de la ciudad que con orgullo marca la entrada al casco antiguo. Es considerado como uno de los ejemplos más valiosos de la arquitectura de principios del barroco en Praga. Y en su interior alberga no uno, sino dos magníficos órganos, que han sido recientemente restaurados y se tocan en la Misa y durante los conciertos de música clásica, que tienen lugar aquí durante todo el año.
Y eso es precisamente lo que vamos a hacer, disfrutar de "Las cuatro Estaciones de Vivaldi" en este marco incomparable. Un auténtico lujo a un precio de lo más asequible.
Iglesia de San Salvador, Praga |
Una hora más tarde, y felices por haber podido vivir esta experiencia, nos disponemos a buscar un sitio para cenar. Y que mejor lugar que alguno de los cientos de restaurantes que inundan el barrio de Mala Strana.
A esas horas las calles se encuentran a rebosar de gente y resulta hasta complicado conseguir cruzar al otro lado del río Moldava atravesando, como no, el puente Carlos.
¿Y qué podemos decir del puente Carlos? Sin duda una auténtica preciosidad, y uno de los icónos de la ciudad de Praga.
Su construcción comenzó en 1357 y debe su nombre al emperador Carlos IV quien ordenó levantarlo para sustituir al anterior Puente de Judit, que se destruyó por una inundación.
Tiene una longitud de 516 metros y la anchura es de casi 10 metros (aunque se queda pequeño para la cantidad de turistas que intentamos atravesarlo... además de los numerosos puestos de souvenirs, pinturas, músicos callejeros...)
En los extremos del Puente de Carlos podemos encontrar tres torres: una en lado de la Staré Město (Ciudad Vieja) y dos torres unidas por un arco en el lado de Malá Strana (“Lado Pequeño”). Se puede subir a ambas para disfrutar de las vistas (nosotros subimos a las situadas en la parte de Malá Strana, pero no hoy, ya os lo contaremos a su debido tiempo )
A lo largo del puente y a ambos lados de éste, se pueden ver 30 espectaculares estatuas de principios del siglo XVIII, aunque en realidad son copias ya que las originales se encuentran en el Museo Nacional de Praga. De entre todas ellas, destaca la de San Juan Nepomuceno, la más fotografiada por los turistas.
Puente de Carlos, Praga |
Según una leyenda, Juan Nepomuceno era el confesor de la reina de Bohemia. El rey, que desconfiaba de su mujer, pidió a San Juan Nepomuceno que le desvelara sus secretos, pero el Santo se negó, por lo que fue ajusticiado por Wenceslao IV. Después de ser torturado, lo ataron y lo tiraron al río desde este mismo puente.
Según la tradición, debes pedir un deseo mientras ponen la mano izquierda en la parte baja de la estatua, donde se encuentra la representación de su martirio
Además en la barandilla del puente desde la que fue tirado al agua fue fijada una pequeña cruz de metal con cinco estrellas (entre la estatua de Juan Bautista y el conjunto de estatuas de San Norberto, Wenceslao y Segismundo).
Hay que poner la mano izquierda en la cruz de forma que cada uno de los dedos toque una de las estrellas, con el dedo corazón en la cruz del medio y se cumplirá uno de tus deseos...
Vamos, que lo que no entiendo es, como pidiendo siempre el mismo deseo a lo largo y ancho del mundo mundial, aún... !!no me ha tocado la primitiva!! Pero bueno, que por intentarlo no quede
Ahora ya sí, toca perderse sin rumbo fijo por las calles de Mala Strana. Mañana más y mejor!!
Mala Strana, Praga |