Día 8: Vitre - Fougures
Qué ver en una tarde en Vitre y Fougures
Después de unas últimas fotos al precioso Mont Saint Michel, decidimos que hoy será un día algo más tranquilo y solo realizaremos un par de visitas, pero ambas imprescindibles: Vitre, un pueblecito de callejuelas empedradas, preciosas casas medievales con entramado de madera y un imponente castillo visible desde casi toda la ciudad. Y Fougères, una pequeña comuna bretona famosa también por su castillo.
Vitré
Ubicado a menos de 40 km de Rennes, Vitré ha conservado intacto un patrimonio arquitectónico excepcional, recuerdo de los siglos XV y XVI en los que se convirtió en una de las ciudades más importantes y prósperas de Bretaña gracias fundamentalmente al comercio internacional de las «canevas». Los mercaderes de Vitré practicaban el negocio de estas telas gruesas hechas de cáñamo crudo que se utilizaban, entre otras cosas, para el embalaje de mercancías y en la confección de las velas de los barcos, y que eran particularmente escasas en la época.
Merece la pena dedicar un par de horas a conocer este pequeño pueblo que parece salido de un cuento.
El casco antiguo tiene una gran cantidad de encantadoras casas de entramado de madera y es uno de los pocos lugares en Francia donde se puede ver una ciudad de estilo gótico completa. Paseando por sus calles vamos descubriendo casas, palacios, plazas y callejuelas a cual más bonito y todo muy bien conservado.
Qué ver en Vitré |
La peatonal Rue de Embas en sin duda la calle más famosa de esta pequeña ciudad. Su continuación en la Rue de la Poterie, la paralela Rue de Saint-Louis o la perpendicular a las anteriores, la Rue de la Baudrairie, que debe su nombre a la antigua cofradía de los «baudroyeurs» o artesanos de cuero (curtidores), son otras de las calles del casco antiguo que merece la pena recorrer. Cuentan con numerosas casas con entramado de madera visto que fueron construidas durante los siglos XV, XVI y XVII.
Qué ver en Vitré |
Merece también la pena acercarse a conocer la atractiva iglesia de Notre-Dame, del siglo XV, que se reconoce rápidamente por su aguja decorada. La iglesia es un ejemplo interesante del estilo gótico flamígero y también contiene elementos interesantes que incluyen una impresionante vidriera.
El lado sur de estilo gótico es la parte más interesante de la catedral, ¡así que no te apresures en la entrada principal sin mirar alrededor!
Pero sin duda, la estrella del Vitre es su espectacular castillo. Data del siglo XI y es una magnífica construcción con varias modificaciones y adhesiones que hacen de él un castillo medieval con un encanto especial con la diversidad de estilos arquitectónicos. Actualmente es la sede del ayuntamiento (es gratis visitarlo) y un museo.
Qué ver en Vitré |
Después de la vista paramos a comer con calma en un agradable restaurante, la Brasserie Saint Yves.
Cogimos el menú de 20 euros (entrada, plato principal y postre): ¡qué delicia! La presentación fue espectacular, las porciones generosas y deliciosas y el servicio fue excelente. De las mejores comidas del viaje y un lugar totalmente recomendable.
Qué ver en Vitré |
Después de reponer fuerzas, es hora de acercarnos a nuestro siguiente destino.
Fougères
Situada a media hora en coche de Rennes (aproximadamente 50 km) se encuentra Fougères, una pequeña comuna bretona famosa por su castillo.
Junto con Vitré, Clisson, Ancenis, Châteaubriant (por nombrar algunos) Fougères se encontraba en la zona fronteriza entre Bretaña y el Reino de Francia y defendió el Ducado de Bretaña hasta el siglo XV.
La ciudad de Fourgeres está dividida en dos:
- "La ville basse" o ciudad baja que abarca un castillo y el centro medieval
- "La ville haute" o ciudad alta, más moderna, y donde podemos encontrar la iglesia de Saint Léonard y el jardín público de Fougeres.
Una buena manera de comenzar el recorrido es en la parte alta de la ciudad y luego descender hacia el castillo a través de los jardines públicos de la Place aux Arbres, que ofrece unas vistas espectaculares de la ciudad medieval y del castillo
Desde este jardín del siglo XIX se puede llegar a la parte baja del pueblo mediante unas escaleras: "Escalier de la Duchesse Anne".
Chateau de Fougeres
El castillo de Fougeres es un castillo de cuento de hadas.
Fue construido sobre una roca alta sobre el río Nancon en el siglo XI. En esta ubicación estratégica, se utilizó para defender las tierras circundantes.
Qué ver en Fougeres |
A lo largo de los siglos, el castillo vio muchas batallas y fue fortificado muchas veces. La ciudad de Fougères creció alrededor del castillo y se convirtió en el hogar de fabricantes de telas, tintoreros y curtidores, que aprovecharon las aguas del río cercano. Y hoy en día sigue siendo un ejemplo brillante, y maravillosamente bien conservado, de una fortaleza militar medieval. De hecho, se trata de una de las fortalezas medievales más grandes de Europa.
Cuenta con 13 impresionantes torres. Un recorrido por el patio y las tres torres te sumergirá en la Edad Media para que descubras la rica y tumultuosa historia de esta fortaleza situada en el corazón de la Marca de Bretaña, su construcción y su papel en la defensa del ducado de Bretaña.
- Precio de la visita: 8,50€.
- Horario de mayo a septiembre: de 10 am a 7 pm todos los días
Alrededor de los muros del castillo hay varios restaurantes y grandes áreas verdes donde poder sentarse y relajarse… e incluso se pueden admirar las grandes ruedas del molino.
Qué ver en Fougeres |
El barrio medieval de Fougeres
El barrio medieval tiene muchos hermosos edificios de entramado de madera, muchos de los cuales datan de los siglos XVI y XVII. Es aquí, en la Place du Marchix, donde el mercado de ganado solía celebrarse en la época medieval.
La iglesia de Saint Suplice fue construida en estilo gótico flamígero en los siglos XIV y XV.
Muy cerca se encuentra la Rue de la Pinterie con más casas de entramado de madera. Esta solía ser la calle principal entre el castillo y la ciudad alta. Asegúrate de admirar las vistas del castillo y el barrio medieval desde el Jardín des Ramparts, que se encuentra en esta calle, luego toma el Ruelle des Vaux a la izquierda para ver las murallas.
Es hora de retirarse a dormir en el que será nuestro hotel por esta noche, el Best Western Hôtel Des Voyageurs.