Templos Toji, Sanjusangendo y Kiyomuzidera (Kioto)

Hoy tenemos un día intenso así que toca madrugar. Sobre las 6.30 am ya estamos en pie y dispuestos a recargar energía con un buen desayuno. Nos acercamos a una “pastelería” que nos ha recomendado el del hostel y que tenemos casi al lado, donde nos hacemos con  unos bollos y unos cafés con leche de lata que digerimos mientras nos acercamos caminando a nuestro primer templo del día, el Nishi-Hongan-ji.

Justo en frente del mismo, cuando voy a hacer la primera foto, me doy cuenta de que…. Joeeeeer, me he dejado la cámara en la habitación, ya decía yo que iba muy ligera de peso... Si es que estos madrugones no son sano, perjudican la neurona y luego pasa lo que pasa... Menos mal que estamos a menos de 10 min andando del alojamiento y podemos volver a buscarla... Ahora si estamos listos para empezar nuestro recorrido fotográfico!!

templo Nishi-Hongan-ji

Este primer templo nos encanta, no sé si porque es el primero o porque se respira tranquilidad y se puede disfrutar sin el agobio de miiiiiles de turistas. Es genial poder pasear con calma por todo el recinto (nos llama la atención sobre todo poder caminar por el pasillo cubierto de madera que une los dos edificios principales!) Y encima se pueden hacer fotos en el interior!! 'Pa que más!!

Otra de las cosas a destacar del templo es la puerta Kara-mon, decorada con figuras de leones chinos. No os podéis ir sin acercaros a verla.

puerta Kara-mon del templo Nishi-Hongan-ji

Siguiente parada el templo Higashi Hongan-ji, gemelo del anterior y a 20 minutillos andando. Pero cuando llegamos está toooodo en obras... Ha sido una visita breve... entrar y salir. Una pena.

Desde aquí cogemos un par de autobuses. La combinación no os la sabría decir, tiramos de 'san' google maps. Eso sí, compramos el pase del día en el propio autobús y nos ahorramos el paseo hasta la Estación Central. Nos comento el chico del hostel que se podía hacer así y perfecto. Eso si, al autobusero inglés básico. “Day pass” y con los deditos 3.

Nuestro siguiente objetivo es el Templo Toji, otro de los muchos templos Patrimonio de la Humanidad de Kioto. En este caso, el templo destaca por su espectacular pagoda de cinco pisos y 55 metros de altura, considerada la estructura de madera más alta de todo Japón.

Pero además merece la pena visitar el Kondo o Salon principal, en cuyo interior se encuentra la imagen del Buda Yakushi, también conocido como el "Buda de la medicina" que cura con su piedad la enfermedad del cuerpo y del alma de toda la gente. La figura es si misma es espectacular, el alo que rodea el gran buda contiene a su vez otros 7 budas más pequeños, dobles del principal, y que simbolizan las diferentes formas en las que Yakushi se aparece a la gente para salvarlos del sufrimiento del mundo. Las 12 figuras que se encuentran bajo el asiento son los protectores de Yakushi, y simbolizan las 12 horas del día y de la noche, los 12 meses del año y los 12 símbolos del zodiaco chino, como reflejo de la creencia de su labor continua de proteger al mundo. Y a ambos lados de Yakushi aparecen otras dos figuras, una a la derecha simbolizando el sol, y otra a la izquierda simbolizando la luna.

Obviamente, no se puede hacer foto por dentro. Pienso, ok, luego compro unas postales... Pero cuando salimos y nos acercamos a la tienda veo que me tengo que llevar una ristra de 20 o ninguna (y encima a un no muy módico precio), así que al final la tentación puede más que la prohibición de hacer fotos y robamos disimuladamente un par. Si, lo sé, está mal, pero sino que vendan un pack de 5 postalicas, solo eso…

Templo Toji, Kioto

Antes de marcharnos, entramos también en el Kodo o salón de Lectura que cuenta con 21 estatuas budistas todas ellas dispuestas al rededor de la figura principal del Buda Dainichi Nyorai.

La visita nos ha gustado mucho, pero aún tenemos un largo día por delante así que volvemos otra vez a coger el autobús que nos dejará en el templo Sanjusangendo.

templo Sanjusangendo Kioto

El edificio principal se considera el edificio de madera más largo de Japón (120metros). Pero lo importante, y por lo que es conocido este templo, es lo que se encuentra en su interior: las 1001 estatuas de Kannon, la diosa budista de la misericordia. Impresiona ver todas esas figuras de tamaño similar al de una persona . Y además, hay otras 28 estatuas de guardianas de Kannon, entre las que destacan Raijin (dios del rayo y el trueno) y Fujin (dios del viento). Estos dos, junto a la estatua grande de Kannon (se encuentra en el centro de la sala) son Tesoros Nacionales de Japón.

En el interior, de nuevo, está prohibido hacer fotos, pero esta vez si que compro el pack de postales  (la foto del exterior del templo es mía, que conste. El resto la postales escaneadas)

interior templo templo Sanjusangendo

Damos un paseo por el jardín exterior y como va siendo hora de comer decidimos acercamos a la estación central. Nos sentamos en uno de los tantos restaurantes que hay en su interior y degustamos unas ricas tempuras mientras descansamos un rato y disfrutamos del aire acondicionado.

La verdad es que la estación de tren es impresionante. Por fuera es muy moderna y tiene un cierto aire futurista. Se terminó de construir en 1997 por el arquitecto Hiroshi Hara y es enooooorme, tiene hasta 15 pisos de altura y se puede subir por las escaleras mecánicas hasta la última planta donde hay buenas vistas de la ciudad. Así que allá vamos!!

Kyoto Station

Subimos, nada más entrar en la estación, por las escaleras mecánicas que están a la izquierda hasta llegar al "sky walk" en la planta 11. Una plataforma suspendida a 45 metros con unas vistas estupendas de la kyoto Tower. Recorremos todo el pasillo (atravesamos la estación por arriba, por el "sky walk") y llegamos a otra zona de restauración, subimos otro pequeño tramo de escaleras y nos encontramos en el Sky Garden, un pequeño jardín situado en la planta 15. Descansamos un rato y volvemos a bajar a la calle (justo por el tramo de escaleras mecánicas del lado inverso por el que subimos al entrar en la estación). Toda una aventura!!

Después de esto, conseguimos apretujarnos de nuevo en el autobús y con otros cientos de personas más nos vamos a visitar Kiyomizudera. La intención es subir por la calle de la tetera, pero entre le calor y las hordas de turistas pues decidimos que por la primera que suba (bueno, más que decidir nos vemos arrastrados por la masa...). Gente, gente y más gente y muuuuuucho calor, y muuuuuuchas tiendas de recuerdos... Pero por fin llegamos al templo!!

templo Kiyomizudera

Después de pasar por el Niomon, la puerta de los dos Reyes, y posteriormente, por la torre de la campana y la preciosa Pagoda de tres pisos, se llega al Hon-do, el edificio principal del Kiyomuzi Dera, hecho enteramente de madera. Vamos directamente a la terraza, desde donde se puede contemplar el edificio de enfrente sostenido por cientos de pilares.

Parece ser que durante un largo período, tirarse desde esta terraza era no sólo un signo de valentía, sino que quien conseguía sobrevivir a los trece metros de caída, veía cumplidos sus deseos. Fue en el periodo Edo donde más saltos se produjeron. Algunas fuentes cifran en 234 el número de valientes, de los cuales casi el 86% sobrevivieron ¿se cumplirían sus deseos? no sabemos, pero mejor nos quedamos con la duda que comprobarlo. Está vez, prefiero no tentar a la suerte...

templo Kiyomizudera

Desde aquí también tenemos una vista privilegiada de uno de los puntos más concurridos del templo (no hay más que ver la cola que se forma...), la cascada Otowa-no-taki.  La fuente se divide en tres chorros de agua y cada uno de ellos tiene una "propiedad" distinta: salud, longevidad o éxito. Pero ojo! solo hay que beber de uno de ellos! hacerlo de los tres es considerado como un gesto de avaricia y tendrá el efecto contrario!.

Allá que vamos nosotros, a ponernos en la cola. La verdad es que a día de hoy no he notado aún ningún efecto , eso si, lo que me sorprende es que después de todas las manos por las que pasan esos cacitos, y teniendo en cuenta que entre uso y uso solo se esterilizan supuestamente con algo así como un láser, no saliésemos de allí con algo de regalo, y no precisamente ninguna de las tres cosas mencionadas anteriormente 

cascada Otowa-no-taki en el templo Kiyomizudera

Y no podemos abandonar el templo sin visitar "las piedras del amor" en el Santuario Jishu, justo al lado del edificio principal. Las dos rocas están separadas entre sí por 18 metros y cuenta la leyenda el que sea capaz de andar de una piedra a la otra con los ojos tapados, conseguirás el amor deseado. 

Cuando salimos de Kiyomizudera es prácticamente la hora del cierre y la afluencia de gente ha bajado notablemente, por lo que podemos pasear con un poco más de tranquilidad por la zona. De camino al santuario Yasaka disfrutamos de caminar por una de las zona más tradicional de Kioto mientras cae el sol.

calles alrededor de Kiyomizudera

Atravesamos el santuario Yasaka, decorado con innumerables linternas encendidas y nos adentramos por las calles del barrio de Gion. Estamos ya agotados de todo el día así que nos limitamos simplemente a buscar algo para cenar.

Santuario Yasaka y zona de Gion

Ya solo nos queda coger el autobús hasta el alojamiento y a dormir!! mañana, como no, más y mejor!!